• Experiencia

    Más de 30 años de experiencia como Psicólogo clínico.

    Leer Mas
  • Tratamientos

    Depresión, Ansiedad, Fobias/Obsesiones, Meditación en Pareja…

    Leer Mas
  • Métodos

    Juntos podemos identificar que tratamiento has de seguir, aplicando la terapia que mejor resuelva tú problema

    Leer Mas
  • Instalaciones

    En un espacio relajante.

    Leer Mas
  • Plano

    c/ Riscos de Polanco, 37 – C.P. 28035 – Madrid

    Leer Mas

Audiolibros, las radionovelas 2.0

Leía hace unos días el soberbio post de mi compañera Ana Escurín  y me vinieron viejos recuerdos y nuevos hábitos a la par. La contradicción de siempre, la fusión de lo antiguo y lo nuevo.

De lo antiguo recuerdo a mi madre a la tarde, plancha en mano, oyendo a Elena Francis y la famosa “telenovela”. Un día estaba con “El retrato de Dorian Grey”, y otro con Celaya narrado. Recuerdo casi espiarla porque nos estaba prohibido escuchar “cosas de mayores”, y recuerdo su expresión de disfrute “escuchando”. También recuerdo su disfrute leyendo en los escasos ratos que se sentaba.

Adoro coser y me estoy entrenando en hacer deliciosas colchas de pachwork , adoro cocinar, adoro nadar… ¡Hay tantas cosas para hacer! Y si a eso le añadimos que cada año estamos más cegatos y a la noche ya ni ves, el espacio para leer pierde protagonismo.

Pero llega la era de la tecnología, los libros electrónicos y el descubrimiento de los audiolibros. Si, me descargué toda una biblioteca porque en esa época no había donde comprarlos. Es evidente que la gran mayoría de lo que tengo son clásicos, textos antiguos donde “el autor” hace años que murió y te merma la culpa. De lo NUEVO no había nunca nada hace dos o tres años.

Yo jamás había leído clásicos, siempre volcada en estar al día en la profesión y éste decubrimiento me vino al pelo, para recuperar el vacío que tenía de lo no teórico.

Se cumplió la fantasía de toda mujer. Hacer tres cosas a la vez, coses, escuchas una novela y miras de reojo a las niñas con sus deberes. (falta acariciar al perro con el pié). ;-)

La cosa empieza a generalizarse y descubres que nada hay más gratificante que cocinar a la vez que audiolees, y el colmo, la aparición de los mp3 acuáticos para dejar de contar largos y abstraerte en la narración de tu libro, mientras nadas. Las pegas: me llaman fantasma paseando por la casa con los cascos porque no me dejan tenerlo con volumen externo, me dicen que se me va a poner voz de “loquendo”.

Yo no hago ni caso mientras fantaseo con las aventuras de Sinué, el egipcio y disfruto de mi radio “a medida”.

@emerayoc

 

Escrito por Elena Merayo Cuesta

www.elenamerayo.com